En Golpeado con un martillo, la artista Bettina Landgrebe, radicada en Marfa, utiliza más de 500 corazones para dar testimonio de la guerra contra el cuerpo femenino. Su inquietante instalación compuesta de corazones suspendidos confronta al público con el tema de los feminicidios. El trabajo destaca el alcance que la violencia de género puede tener en una comunidad y cómo puede alterar una cultura.

ESTA EXPOSICIÓN ESTÁ DESTINADA A UN PÚBLICO MADURO. Se recomienda discreción de los padres.

Esta exposición es posible gracias a la generosa donación del patrimonio de Lineaus Hooper Lorette. El apoyo para esta exposición proviene de la Fundación Mellon, la Fundación del Museo de Arte de El Paso y el Departamento de Asuntos Culturales y Museos de la Ciudad de El Paso.